Es un hecho bien establecido que la depresión puede ser hereditaria, y algunas personas son más propensas a tener depresión que otras. A veces, los episodios depresivos pueden ser desencadenados por ciertos eventos de la vida en personas sin antecedentes previos de depresión. La depresión también puede estar relacionada con otros problemas médicos. Sin embargo, las personas rara vez ponen alergias y depresión juntas.
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¿Las alergias pueden causar depresión?
La respuesta a esta pregunta es sí, las alergias pueden llevar a la depresión. Las alergias a diversos productos químicos y alimentos pueden afectar gravemente el estado de ánimo y el comportamiento de las personas susceptibles y pueden causar enfermedades depresivas de tres maneras.
1. Síntomas alérgicos
Los síntomas de alergia, como ojos rojos y con picazón, constantes estornudos y olfatear pueden ser una molestia y generalmente son persistentes. Se vuelve muy difícil respirar fácilmente o tener un sueño tranquilo con la nariz tapada y tapada. Esto puede ser agotador, haciendo que las personas con alergias sean dos veces más propensas a deprimirse en comparación con aquellas que no son alérgicas a nada.
2. Sus efectos sobre el sistema nervioso central.
Las alergias y la depresión están relacionadas. Una de las razones es que las alergias pueden afectar a cualquier sistema del cuerpo humano y el sistema nervioso central no es una excepción. Las alergias pueden ralentizar el proceso de pensamiento, lo que lleva a la irritabilidad y agitación. Los efectos de las alergias en el sistema nervioso central también pueden llevar a problemas de aprendizaje, comportamiento agresivo, nerviosismo, ansiedad, esquizofrenia y depresión.
3. Conexión biológica
La alergia puede hacer que células específicas en la nariz liberen citoquinas que son proteínas inflamatorias. Estas citoquinas tienen ciertos efectos en el cerebro y pueden llevar a un aumento de la somnolencia y una concentración deficiente. Además, las citoquinas también pueden provocar sentimientos de tristeza y malestar, lo que aumenta la probabilidad de que las personas se depriman.
Cómo lidiar con la depresión causada por las alergias
Las alergias y la depresión tienen que ser tratadas por separado. Aunque la depresión mejorará cuando los síntomas alérgicos estén bajo control, el tratamiento para la depresión no debe ignorarse.
1. Tratamientos para las alergias.
- Evitar los alérgenos: la mejor estrategia para tratar las alergias es evitar los alérgenos. Los factores desencadenantes deben ser identificados y evitados.
- Medicamentos para los síntomas: los síntomas alérgicos como la secreción nasal, los ojos rojos y la picazón pueden controlarse tomando medicamentos antialérgicos. Estos medicamentos, incluidos los comprimidos recetados o de venta libre, los jarabes, las gotas para los ojos y los aerosoles nasales, pueden reducir la intensidad y la gravedad de estos síntomas.
- Irrigación nasal con solución salina : la irrigación nasal con solución salina o salina estéril es una forma muy efectiva de abrir una nariz tapada. Están disponibles botellas o bulbos de irrigación diseñados específicamente, y usted puede hacer la solución salina mezclando un poco de sal en agua hervida y enfriada. Enjuágate la nariz varias veces al día. Limpie y seque completamente el equipo después para evitar infecciones.
- Reduzca la exposición a los ácaros del polvo: los ácaros del polvo también provocan alergias, por lo que es una buena idea deshacerse de ellos junto con la caspa de mascotas. Lave la ropa de cama en agua tibia con frecuencia y reemplace las alfombras con pisos duros si es posible. El uso de aspiradoras con filtros finos también es útil.
- Reduzca la humedad: mantenga los niveles de humedad lo más bajos posible. Si hay fugas o lugares húmedos en su hogar, hágalos reparar. Mantenga el baño y la cocina secos, y use ventiladores y deshumidificadores si es posible.
2. Tratamientos para la depresión.
Terapia de conversación
Las alergias y la depresión deben tratarse por separado. Uno de los mejores tratamientos para la depresión es hablar con un terapeuta capacitado. Hay varias maneras de tener esta terapia. A algunas personas les resulta útil recibir la terapia durante algunas semanas o meses y centrarse en los problemas clave; mientras que para otros, la terapia a largo plazo es más beneficiosa. Usted y su terapeuta decidirán cuánto tiempo necesitan esta terapia juntos. Los tipos comunes de la terapia de conversación son:
- Terapia cognitiva conductual: la identificación de su patrón de pensamiento y de cómo se comporta en ciertas situaciones es crucial. Su terapeuta puede guiarlo para modificar estos patrones y esto puede llevarlo al camino de la recuperación.
- Terapia interpersonal: la forma en que trata con otras personas y cómo su comportamiento lo afecta a usted es identificado y corregido en esta forma de terapia. Su terapeuta puede sugerir mejores formas de interactuar con las personas que lo rodean para mejorar su salud mental.
- Terapia de resolución de problemas: como su nombre indica, se identifica el problema clave al que se enfrenta y se elabora una solución. Puede haber más de un problema, y estos serán identificados y resueltos uno por uno.
Medicamentos
Los medicamentos son muy efectivos para tratar la depresión. Puede tener una combinación de medicamentos y terapia para obtener excelentes resultados. Hay muchos tipos de antidepresivos, por lo que si uno no funciona para usted, su médico puede recetarle otro. La dosis se puede ajustar de acuerdo con su respuesta y, a veces, se requieren más de un medicamento para obtener los mejores resultados.
Los antidepresivos tricíclicos (TCA), los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS), los inhibidores de la monoaminooxidasa (IMAO) y los inhibidores de la recaptación de norepinefrina (ISRS) son ejemplos de algunos antidepresivos eficaces.