Los lunares vienen en todas las formas, tamaños y colores. Estas manchas no cancerosas pueden oscilar entre el color de la piel ligeramente más oscuro y el marrón o negro muy oscuro. Puede haber cabello oscuro o negro sobre ellos. Los lunares congénitos están presentes en el nacimiento, pero la mayoría de los lunares se adquieren más adelante en la vida. También se denominan como “puntos de belleza” y son inofensivos.
Contenido
¿Son normales los cambios molares en el embarazo?
Es bastante común tener algunos cambios en los lunares durante el embarazo y no hay necesidad de preocuparse por ellos.
Durante el embarazo, los lunares existentes pueden volverse más grandes o de color más oscuro, especialmente si están presentes en los senos, la cara, los muslos y las axilas o alrededor del área vaginal. Los lunares están formados por células de la piel con una concentración muy alta de melanina. El estrógeno y la progesterona, que están presentes en cantidades muy altas en el cuerpo durante el embarazo, estimulan la producción de melanina. Esto puede conducir a la formación de nuevos lunares o pecas y también puede hacer que los topos existentes sean más oscuros.
Cuándo preocuparse
La mayoría de los cambios molares en el embarazo, como el número, tamaño o color, son inofensivos. Muy raramente puede haber algunos cambios que pueden ser cancerosos. Debe consultar a su médico de cabecera si observa alguno de los siguientes cambios en un lunar:
- Si un lunar plano se levanta
- La mayoría de los lunares son circulares u ovalados, consulte a su médico de cabecera si adquieren bordes irregulares o tienen una forma asimétrica
- La mayoría de los moles tienen un solo color. Si tienen un color desigual, deben ser revisados.
- Si el lunar se pone sensible y es de color rojo
- En caso de dolor o picazón en ella
- Cualquier forma de sangrado o formación de costra
- Cualquier cambio marcado en el tamaño de la mole
Cuidado con los lunares cancerosos
La mayoría de las veces, los lunares no son cancerosos. Muy raramente, pueden tener una transformación maligna y convertirse en un “melanoma”, que es una forma muy agresiva de cáncer de piel.
Los melanomas tienen un crecimiento rápido y son manchas oscuras, y pueden surgir cuando un nuevo crecimiento o un lunar preexistente pueden convertirse en uno. Si un lunar crece muy rápidamente en tamaño, tiene bordes irregulares o forma y sangra o pica, debe evaluarse inmediatamente para descartar una transformación maligna.
Si se detecta en etapas tempranas, la cirugía es la opción de tratamiento con muy buenos resultados. Se requiere un seguimiento adicional para detectar y prevenir cualquier recurrencia.
Consejos para prevenir lunares cancerosos
Las personas con muchos lunares en sus cuerpos deben tener precaución adicional para evitar la aparición de melanomas. Lo mejor para reducir las posibilidades de tener un melanoma es minimizar la exposición a la luz UV y el daño solar.
Aquí hay algunos consejos útiles para proteger su piel:
- Entre las 11 AM y las 3 PM el sol está en su punto más fuerte, trate de evitar la luz del sol durante este tiempo y permanezca a la sombra.
- Prefiere ropa de manga completa, y trata de usar sombreros y gafas de sol mientras sales.
- Es esencial usar una pantalla solar con un SPF alto. Lo más importante es volver a aplicarlo cada dos horas y especialmente después de nadar.
- Se deben evitar las camas de sol ya que emiten altos niveles de rayos UV.
Otros cambios en la piel durante el embarazo
Si bien los cambios de mole en el embarazo son bastante comunes, hay muchos otros cambios en la piel observados durante el embarazo, algunos de ellos son:
1. The Pregnancy Glow
El resplandor del embarazo no es un mito. La piel brillante observada por muchas mujeres embarazadas se debe a un aumento en el volumen de sangre y la abundancia de flujo sanguíneo en los pequeños vasos sanguíneos debajo de la piel. Las glándulas sebáceas de la piel también se vuelven más activas durante el embarazo y le dan a la piel un aspecto muy brillante. Estos cambios se observan en las personas que no están embarazadas cuando aumenta la frecuencia cardíaca, especialmente cuando están emocionados o emocionados. El embarazo también causa un aumento en la frecuencia cardíaca y conduce a una piel radiante.
2. Acné
El acné puede ocurrir durante el embarazo y generalmente es muy leve. Las glándulas sebáceas se vuelven muy activas durante el embarazo y los poros se agrandan y producen acné. Los granos siempre desaparecen después del parto.
Es importante tratar la piel con suavidad y usar productos de limpieza suaves como los exfoliantes a base de avena. Los medicamentos para el acné están asociados con defectos de nacimiento y nunca deben usarse durante el embarazo.
3. Línea Nigra
La mayoría de las mujeres tienen una línea blanca tenue en su barriga desde el ombligo hasta el hueso púbico. Esto se denomina Linea Alba. Durante las últimas etapas del embarazo, este puede volverse muy oscuro y se denomina Linea Nigra. Poco a poco se desvanece algunos meses después de dar a luz.
4. Palmas rojas y plantas de los pies
Además de los cambios molares en el embarazo, las palmas y las plantas de los pies también pueden experimentar algunos cambios. Debido al aumento en el volumen de sangre y al flujo sanguíneo durante el embarazo, las palmas y las plantas pueden tener un color rojizo y puede haber un leve picor. No hay nada de qué preocuparse por estos cambios.
5. Etiquetas de piel
Algunas pequeñas etiquetas pueden desarrollarse en la piel durante el embarazo debido al crecimiento excesivo de la capa más superficial de la piel. Estos son inofensivos y se ven con más frecuencia dentro y alrededor de los pliegues de la piel, como el cuello o debajo de los brazos, o donde la ropa roza constantemente con la piel, como debajo de las correas del sostén. Desaparecen después del parto y pueden eliminarse quirúrgicamente si causan problemas cosméticos.
6. Venas araña
Estos son el resultado de una combinación de aumento del volumen sanguíneo, flujo sanguíneo y hormonas del embarazo. Los tres conducen a una mayor visibilidad de los pequeños vasos sanguíneos debajo de la piel.
Estas arañas vasculares son de color rojizo o morado y, aunque algunas de ellas desaparecen lentamente después del parto, muchas persisten. Estos pueden ser fácilmente camuflados con maquillaje o tratados por dermatólogos.